Las piscinas hinchables son una alternativa viable a las piscinas enterradas o tubulares.
En efecto, en el mercado se encuentran disponibles incluso modelos muy grandes con sistema de filtración incluido.
Sin duda, la ventaja principal de estos modelos de piscinas hinchables es su montaje fácil, de hecho, son suficientes pocos pasos para que esté lista para su uso.
Hay que colocar la piscina en una superficie plana, hinchar el anillo y llenarla con agua.
Son resistentes gracias a los materiales modernos utilizados, que garantizan resistencias y fiabilidad, como el Duraplus, compuesto por una capa interior de poliéster, resistente a los cortes y a la torsión, y dos capac exteriores de PVC para una protección adicional contra los factores externos.
Primero, hay que tener en cuenta la capacidad que se necesita. Esta categoría incluye modelos con capacidad máxima de dos personas (los más pequeños) hasta 10 personas para las piscinas más grandes.
Otra característica importante es el sistema de filtración, que permite mantener el agua limpia y transparente.
Según el modelo de piscina hinchable, el fabricante proporciona una amplia gama de accesorios que se pueden comprar por separado.
Para los modelos más grandes y altos, un accesorio fundamental son las escaleras a lo largo de los bordes, para entrar y salir cómodamente de la piscina.
Otro accesorio es el tapiz de suelo, que se coloca debajo de la piscina y permite aislarla del suelo, reduciendo el riesgo de que deslice o se pinche.
También son fundamentales los varios juegos de limpieza y mantenimiento, para mantenter el agua limpia y poder reparar cualquier daño en un segundo.